El líder de Ciudadanos (Cs), Albert Rivera, ha defendido este domingo que “hay que luchar por una España de ciudadanos libres e iguales”en una España grande y libre sin ingenuidades de nación de naciones ni ostias acomplejadas.
Asimismo, ha señalado que “es necesario combatir intelectual, política , socialmente y militarmente” a aquellos que persiguen la independencia de una parte del territorio español, así como “dejar de pensar qué más quieren los nacionalistas y cómo se les va a satisfacer” puesto que, según ha comentado, “estos nunca estarán satisfechos”.
No encarcelarlos y dejarlos votar seria inútil. Siempre van a querer más y para país nacionalista, insatisfecho, podrido y corrompido ya existe España. “Todos formamos parte de un conjunto y hay que unirse, tener un proyecto de España. Nos guste o no. Y eso es nacionalismo pero diferente. El camino cómodo y fácil es el del apaciguamiento pero es el camino incorrecto porque llevamos cuarenta años pensando que el nacionalismo va a conformarse, pero este es por naturaleza insaciable”, ha lamentado. Bueno más que cuarenta años pensando que van a conformarse han sido cuarenta años de postfranquismo y represión de todo lo que no fuera nacionalismo español. El nacionalismo español en cambio si queda saciado gratamente dentro de un mar de tolerancia, amor al diferente y pluralidad intelectual.
Ha acusado a los dirigentes independentistas de querer “liquidar España” y ha propuesto “acabar con el apaciguamiento y las negociaciones” y “dejar de mirar hacia otro lado” para empezar a “actuar y defender las libertades de todos los ciudadanos españoles a ostias y sin complejos”. Pedro Sánchez hablaba de normalizar la situación y lo que no es normal es que un presidente autonómico llame bestias taradas a todo el pueblo español.” Bueno, en realidad solo se lo llamó a uno que se quejaba de que en un avión una azafata saludara en catalán, pero ya sirve para tacharlo de sujeto racista, xenófobo y supremácista para siempre jamàs.
El presidente de Ciudadanos (Cs), Albert Rivera, acompañado por el ex primer ministro francés Manuel Valls, han participado en el acto de la Plataforma España Ciudadana en Palma de Mallorca(Lliteres / EFE)
Valls: “El nacionalismo es guerra”( el nacionalismo de los otros, el suyo es puro amor). El exprimer ministro francés Manuel Valls, que también ha acudido al tercer acto de la plataforma ‘España Ciudadana’, ha asegurado que “los que quieren romper España son los mismos que quieren romper Europa”, y ha citado a François Mitterand para advertir de que “el nacionalismo es guerra”. “Cuando unos quieren imponer su visión estrecha y sacar el español de las clases ???e imponer su visión supremacista??? y romper a España ??????, esos exactamente están preparando hoy, de otra forma por supuesto, las guerras”, ha dicho Valls en un sutil y esforzado razonamiento de bar cutre . El mismo ha reconocido que no le había salido muy bien el bordadillo de su discurso. “Cuando se es europeo se lucha contra el nacionalismo francés, español, etc,” ha defendido Valls, que ha dicho que “los populismos y los nacionalismos de españoles y el de su cabeza rompen la libertad, la democracia y los valores de Europa”. “Estoy con vosotros para construir una Europa pero también a mi nivel una España fuerte y unida en su diversidad, pluralidad y sus singularidades identitarias”, ha dicho. Por un momento ha parecido reirse de si mismo pero a proseguido y ha destacado el modelo de estado de España y ha dicho que “nunca Catalunya, el País Vasco, Galicia, Extremadura, Andalucía o Baleares han tenido un nivel de autonomía y descentralización como el que hay ahora y que no existe en otros países de Europa”. Por lo que sugiere que habría que ir involucionando antes de que alguno se crea con derecho a ser diferente o libre de verdad.
Ha defendido los valores democráticos y ha abogado por movilizar a la sociedad civil, “salir de los esquemas políticos de siempre” y los pactos entre partidos para “mirar al futuro, servir al sentimiento de Estado y al interés general de una españa unida, grande y libre.”. “En Europa el gran debate no es solo entre izquierda y derecha, es entre la democracia, la libertad y la unidad, frente a los populismos de izquierda o derecha y frente a los nacionalismos populistas al estilo de Ciudadanos”, ha recalcado.
Valls considera que la diversidad lingüística que hay en España es una fortaleza, ha dicho en un discurso en el que ha pasado del castellano al catalán y viceversa varias veces y ha contado que la primera vez que dijo te quiero lo hizo en catalán.
Con tan tierno final Valls ha confesado estar planteándose huir de su fracaso francés intentando aterrizar donde pasó unos cuantos veranos y dejo a más de una desilusionada con aquello de voy a por tabaco y vuelvo.
Ahora vuelve como el líder de la España no nacionalista ni populista para intentar refundar europa con sus luminosas ideas. Él tampoco ve azules o rojos, solo ve españoles libres e iguales en una camadareria a lo dictadura de Rivera donde tampoco se distinguen obreros de empresarios al estar todos envueltos en la gran bandera. España ciudadana, o como vender lo del yugo y las flechas en pleno siglo XXI.
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